Ejercicios orofacial para niños

Ejercicios de motricidad oral con imágenes pdf

El término motricidad oral se refiere al uso y la función de los músculos de la cara (labios, lengua y mandíbula). Para masticar y tragar, los niños necesitan tener la fuerza, la amplitud de movimiento y la coordinación adecuadas. Cuando un niño tiene limitado el movimiento, la coordinación y/o la fuerza de los labios, la lengua y/o la mandíbula, comer es difícil. Póngase en contacto con el médico de su hijo si estos problemas son evidentes. El médico puede remitirle a un logopeda o a un terapeuta ocupacional -profesionales licenciados que evalúan y tratan los déficits de la motricidad oral-.

Su hijo puede realizar los siguientes ejercicios de motricidad oral para mejorar la fuerza, la amplitud de movimiento y la coordinación de los labios, la lengua y la mandíbula. Utiliza las líneas en blanco de abajo para crear tu propia rutina de ejercicios de motricidad oral.

Ejercicios de motricidad oral para el habla

se refieren al funcionamiento y uso adecuados de los músculos faciales (labios, mandíbula, lengua, mejillas y paladar) para hablar y comer. Lograr la motricidad oral es una parte importante del desarrollo de la comunicación y la alimentación de cada niño. El desarrollo normal de la motricidad oral comienza durante la etapa fetal y continúa hasta los 4 años de edad. A los 3 años, el niño debe ser capaz de consumir líquidos y sólidos a través de pajitas y vasos de boca abierta, y de masticar texturas de alimentos avanzadas, como frutas enteras, carnes, etc.

Un retraso o una desviación en el desarrollo oral-motor puede provocar una escasa capacidad de comunicación verbal y dificultades de alimentación. Algunos niños diagnosticados de Trastorno del Espectro Autista (TEA), Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), Síndrome de Down, Discapacidad Intelectual y Retraso Global del Desarrollo presentan debilidad de los músculos orales. Los ejercicios de motricidad oral ayudan a mejorar la fuerza, la amplitud de movimiento y la coordinación de los músculos orales, lo que facilitará una mejor función del habla y la deglución.

Ejercicios de motricidad oral para niños pequeños pdf

Si desea más información sobre nuestros programas y cómo trabajamos, utilice el siguiente formulario para enviarnos un mensaje. Nos pondremos en contacto con usted lo antes posible. También puedes llamarnos por teléfono al 01 4002016.

Como complemento, puedes ayudar a tu hijo a fortalecer su musculatura oral con los siguientes ejercicios. Lo más fácil es que tu hijo te imite haciendo los ejercicios. Sea creativo y entusiasta y, sobre todo, ¡diviértase!

Procedimiento: el niño sostiene media uva o una pasa, etc., en el borde superior justo detrás de los dientes (no en los dientes) y empuja hacia arriba con la lengua (durante unos segundos, ampliando el tiempo día a día) – ¡luego la recompensa de comerse la pasa!

Ejercicios de motricidad oral para el autismo

Como adultos, a menudo damos por sentadas las habilidades de comer, beber y hablar. En realidad, se trata de procesos increíblemente complejos que exigen que una multitud de habilidades motoras orales trabajen juntas para funcionar eficazmente. El cierre de los labios y el redondeo son habilidades esenciales para aprender a comer y beber de forma segura y para el desarrollo del habla y la articulación adecuados.

El cierre de los labios es la capacidad de juntarlos para formar un sello. Esta habilidad es necesaria para crear lo que llamamos sonidos «labiales» como «m, b y p». El cierre labial también es crucial durante la hora de la comida, ya que permite al niño cerrar los labios alrededor de un alimento, una cuchara, un tenedor o un vaso para beber y recibir la nutrición.

El redondeo labial es la capacidad de sobresalir los labios y juntarlos en forma circular. Vemos el redondeo de los labios cuando producimos los sonidos «w» o «oh». El redondeo de los labios es esencial para beber con pajita y ayuda en gran medida a recuperar la comida de los utensilios.

Algunos niños, como los que tienen un tono bajo, retrasos en el desarrollo o trastornos motores del habla, pueden tener dificultades para adquirir la habilidad de cerrar y redondear los labios de forma independiente. Consultar a un logopeda licenciado es el primer paso para descubrir si su hijo está desarrollando adecuadamente estas habilidades esenciales. A continuación encontrará actividades sencillas y divertidas que puede practicar con su hijo para ayudarle a desarrollar el cierre y el redondeo de los labios.