Aprende a hablar, leer y escribir correctamente en castellano es un proceso largo. Los niños en primaria aprenden los temas más básico que componen a la lengua, sin embargo, queda mucho camino por recorrer.
Gracias a su gran dificultad, los alumnos se instruyen conforme a su edad y rango académico. Los niños de quinto de primaria son unos de los más grandes y están aptos para estudiar con mayor facilidad.
Es normal que a esta edad, los alumnos muestren resistencia para practicar y memorizar las reglas gramaticales. Por eso, es importante reforzar el hábito y explicarle los beneficios de hablar y escribir correctamente.
Aquí vamos a dejar una guía con ejercicios de lengua para niños de quinto de primaria.
Descarga un cuaderno con ejercicios de lengua para quinto de primaria
Contenido
Para comunicarse correctamente, es necesario aprender a hablar y escribir bien. Los niños deben comprender la importancia de ello para tener interés sobre la asignatura.
Muchos de ellos no toman la suficiente el suficiente interés y se convierten en adultos con dificultades para escribir o hablar sin errores. Esto, sin duda, les afecta como profesionales y en su vida rutinaria como seres humanos en sus proceso de comunicación.
Los alumnos de quinto de primaria suelen tener entre 10 y 11 años de edad. En esta etapa, se pretende afianzar los conocimientos en temas como: palabras agudas, llanas y esdrújulas, adjetivos, sinónimos y antónimos, palabras polisémicas y más.
En la guía que dejamos aquí debajo está compuesta por todos los temas que corresponden a la asignatura. Es ideal para practicar en casa. Para obtenerla, solo es necesario hacer clic sobre el enlace y se descarga un documento en formato PDF.
Guía de ejercicios de lengua para alumnos de quinto de primaria
Al tenerlo en el dispositivo correspondiente, está lista para imprimir y usar en cualquier momento. La guía pueden usarla los maestros o padres porque el proceso involucra la enseñanza y refuerzo de ambas figuras.
Consejos para incentivar a los niños a aprender lengua en casa
Motivar a los niños a ver lengua como una asignatura atractiva es una tarea titánica. Son muy pocos los que tienen interés en ella y aprenden las reglas con facilidad.
La idea es forjar un hábito desde muy pequeños para no tener tantos problemas a esta edad. Para ello, aquí vamos a darte algunos consejos que puedes poner en práctica.
Forja un hábito de estudios
Si deseas que tu hijo sea más aplicado en clase, la única forma de lograrlo es forjando un hábito en casa. En este tiempo, que puede ser de una hora diaria, se puede enseñar y reforzar poco a poco las asignaturas que correspondan.
Lo ideal es que sea en una hora en la cual el niño aún esté activo y muy despierto. No se recomienda al caer la noche porque está cansado de las actividades del día y no prestará la atención necesaria.
Otra recomendación para fortalecer este hábito es escoger un espacio de la casa. Puede ser una habitación en donde no vaya a tener interrupciones, distracciones o donde hayan otras personas que impidan atención total a las asignatura.
Descubre su interés
Un punto sumamente indispensable es descubrir el interés del niño. Saber qué le gusta o cuáles son sus pasiones para aplicar el aprendizaje en ese contexto.
Un herramienta que siempre funciona es involucrar la música como método para memorizar. Podrías poner música a ciertas reglas gramaticales para aprender mientras se divierte.
El plus en este aspecto es tomar en cuenta los intereses del estudiante para no hacer la actividad como un castigo, sino como un momento de creatividad. A partir de allí, puedes adaptar a casi cualquier interés del niño.
Cambia la estructura de enseñanza
Está bien encontrar una herramienta que sea funcional y mantenerla por un tiempo, pero los niños suelen aburrirse muy rápido. Para ello, la recomendación es planificarse con tiempo y cambiar la estructura de enseñanza constantemente.
Para planificarte puedes hacer un calendario mensual con todas las actividades semanales. De esta forma, puedes ver cuál de todas las herramientas funcionan o le llaman la atención para aprender.
Refuerza su autoestima
Hay niños que aprenden con facilidad y otros que requieren más dedicación para fijar los conocimientos y esto puede desmotivar el proceso. Es indispensable que como padre o maestro siempre refuerces la enseñanza con palabras positivas o de aliento.
No es necesario molestarse si el niño no avanza con rapidez, toma el tiempo necesario para que aprenda. La idea es que los conocimientos queden fijados en su mente y no avanzar lecciones por avanzar.
Aunque esto parezca un simple consejo, es uno de los más importantes para continuar.
Crea expectativas
Es necesario vender al niño la idea de que lo que aprende es importante y extraordinario. Que los conocimientos obtenidos le serán útiles durante toda su vida. Sobre todo al principio, es importante hacerle sentir intriga e interés para que poco a poco vaya adaptándose al proceso.
